Miro el papel mientras dibujo, giro el lápiz, escurro el pincel. Espío el paisaje, transpiro y me inspiro. Siento el trópico morelense en los poros, se resbalan los anteojos por mi nariz. Escucho conversaciones. Y el correr del agua.
Es y no es. Chiconcuac, Morelos. 29 de mayo.